LA CARICATURA POLÍTICA EN EL PERÚ SIGLO XIX

El humor, nos lleva a pensar del modo de presentar, enjuiciar o comentar alguna realidad, llevándola al lado cómico, risueño de las cosas.
La caricatura, es una exageración o la distorsión de la apariencia física de una persona o varias, en algunos casos llevarlos a lo humorístico. Es por esto que ambas palabras están ligadas, las cuales fueron aprovechadas inteligentemente por la mayoría de los periódicos años atrás y que aún siguen vigentes.
La sátira fina, la burla cruel han sido con frecuencia las armas favoritas para combatir en las casi constantes tempestades políticas de la historia del país.
Siempre fue el humor lo más estimado del periodismo, tanto en el Perú como en el extranjero. Incluso los periodistas que lo cultivaron con éxito son los mejores pagados del mundo porque para un director la posibilidad de arrancar una sonrisa de sus lectores es algo que no tiene precio.



Así como es sencillo reconocer el humor a simple vista, es difícil definirlo, y más aún si está relacionado con la política. Un comentario irónico, una caricatura, pierden vida rápidamente y cuando los encontramos en los viejos periódicos resulta complejo establecer la importancia que se le concedió en su tiempo.

Debemos atenernos, sobre todo, a los comentarios de sus contemporáneos o a la visión de los grandes historiadores que revisaron las hemerotecas. La mejor prueba de la eficacia de una caricatura está en el decreto de clausura o cierre del periódico a causa de la irritación provocada por el dardo de la pluma o del lápiz.

Ubicamos como una de las primeras caricaturas la imagen del periodista español Gaspar Rico y Angulo en la portada del periódico El Nuevo Depositario publicado en Octubre de 1821 por el clérigo José Joaquín Larriva; desde ahí en adelante la caricatura será infaltable en el periodismo y reforzará su calidad a la par que el avance técnico de la ilustración. Algunos extranjeros participaron en su desarrollo como la muy citada colección del artista francés Williez (“Cándido”), un álbum de dibujos satíricos dedicados a los generales Echenique y Castilla.


Es precisamente Castilla una de las primera grandes víctimas del periodismo satírico que ya para entonces había afilado su armas y conquistado público. Pardo y Aliaga, Juan Espinoza y otros utilizaron sus periódicos para maltratarloDos grandes periódicos que surgieron con la sátira y la caricatura fueron: El Murciélago y la Zamacueca, después vendrían muchos periódicos satíricos y de caricaturas que siguieron la huella de los verdaderos pioneros del cual contaban con poca decencia o ética. El objetivo era la demolición del adversario aprovechando los espacios que se abrían apenas las leyes represivas o controlistas bajaban la guardia.
Lo que nunca se menciona es quienes están detrás de estos trabajos artísticos, quienes son esos creadores, esas personas que le dan vida a esas imágenes, para esto se debe tener en cuenta que un buen caricaturista por ejemplo, trabaja unos 30 años, de tal manera que su obra transita por distintos episodios de la historia y frecuentemente por muchas publicaciones.
Entre los muchísimos dibujantes la lista es larga. Seguramente habría que distinguir categorías, esto es, separar a los que simplemente caricaturizan con sus trazos a un personaje (a veces añadiendo textos propuestos por un redactor) de los que agregan creativamente comentarios de actualidad, sean políticos o sociales.


Cuando se menciona hechos históricos y vemos las imágenes, nos causa gracia; pero también tenemos que mencionar que hubieron casos en que algunos personajes no estuvieron de acuerdo con estas caricaturas, como sucedió en 1834, en donde el periódico El Limeño, sería llevado a juicio por Manuel Antonio Colmenares, un firmante del acta de independencia y ex diputado por Huancavelica que a la sazón se desempeñaba como magistrado, en el cargo de fiscal y era partidario reconocido del presidente Orbegoso. La razón para la demanda, aunque tenía un trasfondo claramente político, pues este periódico era de oposición al gobierno, se centró en las burlas públicas sufridas por Colmenares, en este y otros medios impresos, debido al prominente tamaño de su nariz, dicha caricatura fue realizada por Pancho Fierro. Algunos versos muy celebrados sobre el tema tuvieron como autor al escritor Felipe Pardo y Aliaga, sin embargo dicha causa fue desestimada.

Esta caricatura de Pancho Fierro muestra al fiscal Manuel Antonio Colmenares. Debido a los comentarios sobre su prominente nariz y con evidente intención política, entabló un juicio al diario El Limeño. La causa, sin embargo, fue destinada.

M.Yaya García.


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EL MURCIÉLAGO


Uno de los primeros periódicos de caricaturas políticas que conocemos (1850) de Manuel Atanasio Fuentes. La publicación es interesante porque ofrece al lector varios datos históricos para comprender el escenario político en la segunda mitad del siglo XIX. Así por ejemplo, en el editorial publicado el l8 de marzo de 1855 (Imagen 01), se refiere que en el año de 1850 el Perú se encontraba en una “guerra de partidos”. Los caudillos Echenique, Vivanco y Elías luchaban como candidatos a la presidencia de la república, para que finalmente, en abril de 1851 fuera elegido el general José Rufino Echenique.

Caricatura: Ante el telesismógrafo
Publicada en: Variedades, Lima, 2 de mayo de 1908. (Imagen 01)


La nota del dibujo menciona: “No se alarme V.E. mi aparato es infalible. El terremoto gordo, el de no te muevas, lo anuncia con la cabeza de abajo. Las otras solo indican tembloretes de menor cuantía.” (5)


El presidente José Pardo le pregunta a un adivino sobre las “revoluciones” de Augusto Durand y sus consecuencias políticas. Sin embargo, ninguno de los dos personajes imaginó en ese momento que el verdadero enemigo del presidente Pardo no era Durán sino Augusto B. Leguía que después lucharía a muerte contra el Pardismo Civilista.
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Caricatura: Astronomía política
Publicada en: Variedades, Lima, 13 de junio de 1908. (Imagen 02)



La nota del dibujo menciona lo siguiente:
-“¿Con que ese tunante Durand ha estado en Lima?Supongo que ya le habrá cojido su policía?.
-No es cierto señor que haya venido Durad: a la fecha debe estar en las montañas de...
- Si, en las montañas de... la luna.”


Augusto Durand era el político más buscado por la policía. Esta caricatura representa la búsqueda del insurgente Durand. Escena nocturna, en un balcón. En primer plano el presidente José Pardo y un colaborador hacen comentario sobre el tipo de fugitivo que era Augusto Durand, debido al conato de rebelión que realizó un mes atrás. En lo alto, la luna, representada con el rostro de Durand, ríe con sorna en su condición de fugitivo.
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Caricatura: Habla el pan
Publicada en: Variedades, Lima, 18 de enero de 1913. (Imagen 03)

Unos huelguistas se manifiestan en defensa del pan grande. Una hilera de panes, que adquieren forma humana, miran expectantes el desarrollo de una asamblea de huelguistas, quienes colman un gran salón, portando los últimos una banderola.

Se reconoce a un grupo de partidarios del gobierno de Billinghurst que están representados como panes. En la nota de la caricatura dice lo siguiente: “Huelga decir que nosotros seremos los que pagaremos el pato de la huelga”.
Después de los rumores de huelga que parecieron aquietarse con la solución de los descargadores de la dársena, prendió efervescente chispa en otras agrupaciones de trabajadores, entrando en huelga varias instituciones del Callao e iguales reclamos hacían los empleados de comercio, con la posible carestía del pan. Se plegaron a esta huelga los galleteros de la fábrica Field y los del Molino Santa Rosa.
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Caricatura: De cabeza
Publicada en: Mundial, Lima, 24 de agosto de 1923. (Imagen 04)

El presidente Leguía, los senadores y los diputados se lanzan de cabeza al mar. La reelección se encuentra a toda marcha y nadie puede detenerla.

Desde los distintos niveles de un trampolín en el mar, los bañistas se lanzan al mar de la reelección. Cada cual representa una senaduría o diputación. El Presidente Leguía se lanza al mar de la reelección.

Atrás, sentados con gestos de crítica, los diputados y senadores que están en contra la reelección. La nota dice lo siguiente: “Nunca tuvo más clararazón este cierto refrán de ocasión, si mi amo se marcha a los toros nos tiramos cristianos y moros, de cabeza a la reelección…


V. Portocarrero Calizaya.


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LA MASCARADA


La caricatura política y el periodismo satírico cobraron un inusitado auge en la segunda mitad del siglo XIX. En imagen una parodia del presidente Pardo personificado como Julio César.


Estuvo con las baterías cargadas de grueso calibre contra el gobierno civilista. Este impreso traía, en cada número, sugestivas caricaturas a todo color referidas a los vaivenes de la política nacional, dichas caricaturas incitaban a la rebelión y al asesinato.
Este semanario en su prospecto de presentación, hostigaría a Pardo con un dibujo, en donde Lucifer abre una cortina, ante la mirada atónica del pueblo peruano, para ver en el interior al Presidente en una fiesta de orgía. En un columna de la izquierda hay este título burlón: “Tiro de la manta el diablo y se descubrió el pastel”. El título de todo el grabado fue: “La Mascarada Nacional”. En el reverso del prospecto, este se componía de una sola hoja el cual llegó a ser más grande que el mismo semanario, hay versos de introducción en todo el largo de la página.

Una nota publicada en el semanario dice: Todas, todas son máscaras que en los sociales ámbitos se acomodan los pícaros para explotar mejor;……….”
El primer número de “La Mascarada” lleva la fecha del 8 de agosto de 1874. Allí se revela una irónica nota que decía: Milá de la Roca, llanamente fue el editor responsable y su responsabilidad, por lo tanto, es puramente legal, pero no intervino en la redacción que es esencialmente anónima.

Lo que más se recuerda entre los historiadores nacionales de la República y contadísimos estudiosos del periodismo patrio, es la relación que tuvo, sea casual o no, una caricatura salida en el segundo número del semanario con el asesinato de Manuel Pardo, justamente en la puerta del Parlamento, el crimen se consumó en 1878.
En dicho dibujo titulado: “El último día de Cesar”, se observaba al Presidente caminando al Senado con su séquito, y al costado derecho estaba Nicolás de Piérola indicando al posible homicida, que en la mano tenía un cuchillo, para que mate al “César”. Todos los autores del drama llevaban vestimenta romana. Lo cierto fue que no murió Pardo apuñalado, sino a consecuencia de un traicionero disparo del sargento Melchor Montoya, asesinato cometido cuando este soldado formaba la Guardia de Honor en el local senatorial y en el momento del crimen, el ex gobernante era presidente del Senado.

A causa de esta caricatura, el editor Augusto Milá de la Roca y el dibujante Joaquín Rizal fueron capturados para ser juzgados, bajo la acusación de instigar al alzamiento y la muerte del mandatario. Pero al saberse que los redactores de la letal hoja eran Benito Neto y Julio Lucas Jaimes, también corrieron la misma suerte de los anteriores.
A pesar de todo ello, “La Mascarada” hablaban muchas veces en son de burla algunas verdades. Así en su número 3 del 22 de agosto, se expresaba con perspicacia al referirse a nuestros parlamentarios con las frases siguientes:
“Las proposiciones de los elegidos del pueblo…que presentan a las Cámaras son salvadoras obras de colosal estatura:

Que se dé treinta mil soles a don fulano
Que se haga una pila en Chaupiguanca.
Que se llama Libertad y no Atahualpa
Que se deshaga ahora lo que se hizo ayer
¡Qué felices somos! ¿Quién se recuerda de la miseria que nos atraviesa?
¿Qué se recuerda del país?
D. Manuel piensa en la forma y modo de organizar nuevas consignaciones.
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Los antiguos consignatarios, sirven de comisión consultiva.
Los ministros de resortes para renovar la máquina.
D. Mariano Ignacio (Prado), espera la indemnización por aquel armamento de marras;
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Los Bancos esperan que se ajuste más la situación para ajustar ellos la cuerda y sacar la tripa del mal año”

M.Yaya García.

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2 Response to "LA CARICATURA POLÍTICA EN EL PERÚ SIGLO XIX"

  1. VISTAZONEWS says:
    29 de diciembre de 2016, 4:46

    Interesante recopilación de la caricatura política en nuestro país, para entender la historia y su devenir hacia nuestros dias

  2. Ciencias Sociales says:
    22 de abril de 2019, 21:40

    HACE FALTA UNA PRODUCCION DE RECOPILACION DE EXCELENTES TRABAJOS DE CARICATURA EN EL PERU DESDE SIGLO XIX AL XX

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